Oh Santa Virgen del Carmen, tus favores y bendiciones son innumerables. Aunque no podemos corresponderte como mereces, te agradecemos sinceramente por darnos el sagrado Escapulario. Acepta nuestra humilde correspondencia y, luego que falta podemos ofrecerte que sea suficiente, entregamos nuestro corazón realizado de simpatía y dedicamos nuestra vida al servicio https://directoryprice.com/listings230547/la-regla-2-minuto-de-aoraciones